Toda sesión con la actriz Silvia Hannemann comienza unos minutos de antes con unas risas y eso ayuda mucho a crear un ambiente relajado para llegar a lo que queremos conseguir.
Dos flashes Cactus RF60X, un paraguas para reflejar la luz hacia la modelo junto con una pared blanca como reflector es suficiente para lograr la foto que tenia en la cabeza.
El paraguas permite rebotar el flash en su superficie, generando una luz amplia que ilumina a la modelo desde diferentes puntos, produciendo así sombras más suaves.
Este esquema se puede utilizar tanto en estudio como en exteriores teniendo en cuenta que en exteriores se podría utilizar un difusor para aprovechar la luz solar.
El paraguas reflector al ser de 100cm fue ideal para sacar el detalle en las partes de la foto que me interesaban como: las arrugas de los guantes de boxeo, la parte del ojo y parte del pelo húmedo.
El Samyang AF50mm F1.4 FE es el objetivo que elegí en esta sesión para probar la luminosidad, la nitidez y el enfoque.
Me pareció espectacular a nivel de detalle trabajando junto con la Sony A7II sin ser esta cámara la que mayor resolución tiene de Sony y la que mejor sistema de enfoque tiene, en la foto se puede apreciar el agua del pelo sobre la piel con un gran detalle aún estando esta fuera de foco, es rápido y luminoso que es lo que necesitaba a la hora de trabajar junto con la modelo en la sesión.
Encantado una vez más con el resultado final y sobre todo por poder compartir otro día de risas con la gran Silvia Hannemann.
Otro día más.